Motor envuelto en cáscara liviana 
 Sabía que la muerte lo esperaba 
 Tenía lo mínimo indispensable 
 Para que su cuerpo no se derrumbara 
 Motor envuelto en cáscara liviana 
 Sabía que la muerte lo esperaba 
 Tenía lo mínimo indispensable 
 Para que su espíritu no se derrumbara 
    Sus ojos de tormenta llenos de relámpagos 
 Ojos maliciosos sufrían a los labios 
 Casi no comía y se asombraba 
 Del lugar en la mesa que ocupaba 
 Vos triste, desvalida 
 No dormía en su cama 
 Su charla como aguijón 
 Largaba veneno a babor   
 Motor envuelto en cáscara liviana 
 Sabía que la muerte lo esperaba 
 Tenía lo mínimo indispensable 
 Para que su espíritu no se derrumbara   
 Su genio realista lo hacía más real 
 No cegaba las cabezas, los hacía pensar 
 Carecía de ese odio que duerme en las almas 
 Que es la traba más lúgubre de la historia humana 
 Somos el pueblo, queremos entrar 
 Al cementerio de la verdad 
 Casi huele azufre, la virtud es del destino 
 Cuando más cruel es la vida más cruel es el dolor   
 Motor envuelto en cáscara liviana 
 Sabía que la muerte lo esperaba 
 Tenía lo mínimo indispensable 
 Para que su espíritu no se derrumbara 
 Motor envuelto en cáscara liviana 
 Sabía que la muerte lo esperaba 
 Tenía lo mínimo indispensable 
 Para que su cuerpo no se derrumbara   
 Me detengo un momento 
 Siento, pienso, conecto 
 Una red a mis pies 
 Hoy soy yo, mañana vos, pasado él 
 Todos en este mismo tren 
 Escucha tu ser, alma y esencia 
 Es la vida que no espera 
 Me apuro para llegar 
 Voy más lento, claridad 
 Me fundo en el humo del mundo 
 Busco el rumbo, quiero entrar   
 Motor envuelto en cáscara liviana 
 Sabía que la muerte lo esperaba 
 Tenía lo mínimo indispensable 
 Para que su cuerpo no se derrumbara 
 Motor envuelto en cáscara liviana 
 Sabía que la muerte lo esperaba 
 Tenía lo mínimo indispensable 
 Para que su espíritu no se derrumbara