Y no escucharé el silencio que he guardado todo el tiempo, no...
Voy a soñar alguna razón en un cruce entre el sueño y Dios. La catedral de abismo y dolor y un puente colgante en lo más alto estoy yo.
Y no escucharé el silencio almacenado por condensación.
La realidad de caos y horror vivida en la corteza del cerebro inferior. Voy a gritar, ladrarle al agujero, al infinito matadero interior. Voy a espantar ladrándole al infierno para no cortarte el cuello amor.
Voy a gritar, a espeluznar al miedo, a engañarme el perro y el dolor. Voy a agarrar mi vida por los pelos y no escucharé el silencio, no.