He aprendí'o de la vida que no importa
La esencia de tu persona, ¿para qué?
Pues la misma te marca con tantas cosas
Que hasta pierdes la esperanza de creer
Sí, lo digo por ti
Porque fuiste tan cobarde y de cruel corazón
A ti mi vida yo di
En una página en blanco firme para ti
Todo mi amor
Qué ironía de la vida y un mal sueño
Nuestro celestino acabó un día siendo
Tu dueño
El muchacho que, nuestro cómplice
El guardián de nuestro amor en ocasiones
Sin embargo, yo, todavía hoy
Lucho por borrar las huellas de tu amor
De aquel dolor que has dejado aquí
Y así como de tus labios el sabor
El sabor amargo
Y algo
De las muchas penas que dejaste en mí
Y he llorado tantas veces tu recuerdo
De la rabia
De coraje e indignación
Y he buscado justificación a eso
Faltando el respeto al verdadero amor
Te di yo tanto valor
Que ese beso y el anillo fue el signo de amor
Que a ti te hice mi mujer, así como yo tu esposo, pero ¿para qué?
¿Para qué?
Qué ironía de la vida y un mal sueño
Nuestro celestino acabó un día siendo
Tu dueño
El muchacho aquel, nuestro cómplice
El guardián de nuestro amor en ocasiones
Sin embargo, yo, todavía hoy
Lucho por borrar las huellas de tu amor
Aquel dolor que has dejado aquí
Y así como de tus labios el sabor
El sabor amargo
Todos esos años que me la pasé a tu lado y digo
Lo hacía solamente por mis hijos
No era por más nada
Mujer desgraciada
Pero todo se paga en la vida
Cada paso que das, cada momento y cada hora
Te llegará la vejez muy sola
Sola
Sola