No tengo nada para ofrecer 
 Nada que Te pueda sorprender 
 Solo un corazón, quebrantado 
 Una y otra vez 
    Y no hay nada que me enamore más 
 Nada que me apasione más 
 Solo Tu presencia, solo Tu mirada 
 Me hace suspirar   
 Me inclino ante Ti 
 Rey que perdona multitud de errores 
 Me inclino ante Ti   
 Digno, eternamente 
 Digno, impresionante 
 Digno, solo ante Ti yo me inclino   
 Señor Jesús, Tú eres 
 Digno, eternamente 
 Digno, impresionante 
 Digno, solo ante Ti yo me inclino, oh   
 No tengo nada para ofrecer 
 Nada que Te pueda sorprender 
 Solo un corazón, quebrantado 
 Una y otra vez   
 Y no hay nada que me enamore más 
 Nada que me apasione más 
 Solo Tu presencia, solo Tu mirada 
 Me hace suspirar   
 Me inclino ante Ti 
 Rey que perdona multitud de errores 
 Me inclino ante Ti   
 Digno, eternamente 
 Digno, impresionante 
 Y digno, solo ante Ti yo me inclino 
 Oh, oh   
 Tú eres digno, eternamente 
 Digno, impresionante 
 Digno, digno, digno, digno, solo ante Ti yo me inclino   
 Mire a los ojos del Rey de ahí donde estás 
 Olvídate de todo tu alrededor 
 Y, mire a los ojos del Rey 
 El único que perdona multitud de pecadores 
 Y su misericordia se está renovando aquí 
 Rendimos y decimos   
 Me inclino ante Ti 
 Rey que perdona multitud de errores 
 Me inclino ante Ti   
 Tú eres digno, eternamente 
 Digno, impresionante 
 Digno, solo ante Ti yo me inclino   
 Señor, marca tu remanente en medio de todas las naciones 
 Gente que no se va a inclinar ante las tentaciones del enemigo 
 Gente que no se va a inclinar ante las propuestas del sistema de este mundo 
 Gente de carne y hueso, pero que solo se inclina ante el Rey de reys, y Señor de senñores 
 ¡Aquí están, Señor! 
 Todavía hay gente santa en esta tierra 
 Todavía hay gente consagrada   
 Nos acercamos al trono de la gracia 
 Y aquí vamos a permanecer, permanecer 
 El trono de la gracia