Quién te juna, quién te embroca,
 
 Pinta brava presumida,
 
 pa' largarte por Florida
 
 como un Ford a patinar.
 
 No manyás, che pelandruna,
 
 que te vende desde lejos
 
 esa piel de zorro viejo
 
 más pelada que Alvear.
 
 Despitá, no seas chitrula,
 
 que te está enfocando el cana
 
 no vengas buscando lana
 
 con la raca que tenés.
 
 Se te manya el expediente,
 
 hasta el modo en que patinas,
 
 vos podrás vender sardinas
 
 pero amor, ¡ni lo soñes!
 
  
  Pinta brava,
 
 no te olvides del pasado
 
 cuando ibas al mercado
 
 a comprar el stokafish.
 
 Engrupida,
 
 te saliste de sirvienta
 
 para ser, al fin de cuenta,
 
 Pinta Brava una infeliz.
  
 
 El dorima que te echaste,
 
 con un feite en el escracho,
 
 cada vez que está borracho
 
 la presume de matón;
 
 y es un ñorse tan amargo
 
 que una noche, en la cortada,
 
 lo achicó con la parada
 
 hasta el loco Napoleón.
 
 No podés meter la mula,
 
 son al cuete tantas mañas,
 
 lechuceando a las arañas
 
 te empacaste, ¡ya lo ves!
 
 Pa' de seda, pa' de alhajas...
 
 Mucho viento en la sesera
 
 y en tu cuarto la catrera
 
 que rezonga tu vejez.