Como una tela araña gris, con el rocío en su lugar Quitas las máscaras del Sol y la mañana vuelve a hablar El humo atrae al corazón, café de siempre sin razón Se escucha la televisión y la vecina grita
Vuelve la sonrisa leve, y en el corazón se mueve La visión de un día para los dos
Con un violento caminar, tus cartas vuelven a llegar Curan la herida de un volcán, la tarde viene a consolar El vino atrae al corazón, curda de siempre sin razón El ruido de aquel callejón y las palabras giran
Vuelve la sonrisa leve, y en el corazón se mueve La visión de un día para los dos
Vuelve la sonrisa leve, y en el corazón se mueve La visión de un día para los dos
El humo atrae al corazón, faso de siempre sin razón El sueño envuelve esta canción y la noche termina
