Quizás mañana, al despertar, ya no encuentres Esas caricias, esas ternuras, también los besos Tal vez recuerdes las cuerdas dulces de esta guitarra Que penetraban, muy dulcemente, dentro tu cuerpo
Las rosas tienen que ceder Y no dar brazo a torcer Como el viento tú serás No amarás ni te amarán
Vivirás solo fantasías Y veras mi fotografías Soñarás con volver un día Yo estaré ya en el tranvía del amor