- 1
Frank Delgado - Konchalovski Hace Rato Que No Monsta En Lada
- 2
Frank Delgado - Travestis
- 3
Frank Delgado - Veterano
- 4
Frank Delgado - Con La Adarga Al Brazo
- 5
Frank Delgado - Cubañolito
- 6
Frank Delgado - Daguerrotipo Familiar
- 7
Frank Delgado - El Pregonero
- 8
Frank Delgado - La Otra Orilla
- 9
Frank Delgado - La Profesora de Teatro
- 10
Frank Delgado - Si Me Pides Un Bolero
- 11
Frank Delgado - Utopías
- 12
Frank Delgado - Afuera
- 13
Frank Delgado - Alicia En El Pueblo de Maravillas
- 14
Frank Delgado - Angustias Y Sagrario
- 15
Frank Delgado - Azúcar a Granel
- 16
Frank Delgado - Bailarina de Tropicana
- 17
Frank Delgado - Balada de Nicanor
- 18
Frank Delgado - Bolero Nostálgico Para Artistas Emigrados
- 19
Frank Delgado - Cadena Paladar
- 20
Frank Delgado - Carnavales
- 21
Frank Delgado - Carta a Santa Claus
- 22
Frank Delgado - Carta de Un Niño Cubano a Harry Potter
- 23
Frank Delgado - Chicas de Ipanema
- 24
Frank Delgado - Chilenos
- 25
Frank Delgado - Cima
- 26
Frank Delgado - Cómo Ser Negro Y No Morir En El Intento
- 27
Frank Delgado - Con La Infancia Y Lo Demás
- 28
Frank Delgado - Conga Bomba
- 29
Frank Delgado - Cuando Se Vaya La Luz, Mi Negra
- 30
Frank Delgado - Cuando Te Vi
- 31
Frank Delgado - Cuatro Para Dos
- 32
Frank Delgado - Cubando de Ultramar
- 33
Frank Delgado - Debo Ser Feliz
- 34
Frank Delgado - Dícen Que Murió La Trova
- 35
Frank Delgado - Dolores
- 36
Frank Delgado - El Adivino
- 37
Frank Delgado - El Gorrión
- 38
Frank Delgado - El Proceso
- 39
Frank Delgado - Elizabeth
- 40
Frank Delgado - Ella Salió Desnuda
- 41
Frank Delgado - Embajadora Del Sexo
- 42
Frank Delgado - En Cuba, Los Trovadores
- 43
Frank Delgado - En La Mitad Del Mundo
- 44
Frank Delgado - Espíritu Y Consumo
- 45
Frank Delgado - Extremistas Nobles
- 46
Frank Delgado - Gabriela
- 47
Frank Delgado - Gallego
- 48
Frank Delgado - Homenaje a Los Dandys de Belén
- 49
Frank Delgado - Inmigrante a Media Jornada
- 50
Frank Delgado - Johnny, El Babalao
- 51
Frank Delgado - La Concupiscencia
- 52
Frank Delgado - La Farándula Habanera
- 53
Frank Delgado - La Guerrilla Frustada
- 54
Frank Delgado - La Habana Está de Bala
- 55
Frank Delgado - La Lucha Libre de Las Lombrices
- 56
Frank Delgado - La Solidaria
- 57
Frank Delgado - Las Damas de La Orquesta de Salsa
- 58
Frank Delgado - Loco Por Ti
- 59
Frank Delgado - María Flaca
- 60
Frank Delgado - Matamoros No Vira Pa'tras
- 61
Frank Delgado - Melesio Tenía Razón
- 62
Frank Delgado - Mi Alma Se Perdió En La Carretera
- 63
Frank Delgado - Mi Mapa
- 64
Frank Delgado - No Me Pidas La Cabeza
- 65
Frank Delgado - No Te Salves
- 66
Frank Delgado - Orden Del Día
- 67
Frank Delgado - Pescador de Sonrisas
- 68
Frank Delgado - Podía Ser (Y No Fue)
- 69
Frank Delgado - Por Haití
- 70
Frank Delgado - Porno Romance
- 71
Frank Delgado - Pupy (Nombre de Colchón)
- 72
Frank Delgado - Razones Para Una Madrugada
- 73
Frank Delgado - Retazos de Amor
- 74
Frank Delgado - Río Quibú
- 75
Frank Delgado - Si El Che Viviera
- 76
Frank Delgado - Si Te Vas
- 77
Frank Delgado - Siempre Botas El Sofá
- 78
Frank Delgado - Son de La Muerte
- 79
Frank Delgado - Soñar Despierto
- 80
Frank Delgado - Soy Un Hombre Que Sufre
- 81
Frank Delgado - Sueño Simples
- 82
Frank Delgado - Tatuaje (Con La Plumilla Del Aliento)
- 83
Frank Delgado - Tendencia Suicida
- 84
Frank Delgado - Tira Y Daca
- 85
Frank Delgado - Troski's Cha, Cha, Cha
- 86
Frank Delgado - Trova-tur
- 87
Frank Delgado - Ustedes Los Trovadores No Saben Na' de La Vida
- 88
Frank Delgado - Viaje a Varadero
- 89
Frank Delgado - Vida Breve
- 90
Frank Delgado - Vivir En La Casa de Los Padres
- 91
Frank Delgado - Wall Street
- 92
Frank Delgado - Yo Sé de Una Mujer
Ella Salió Desnuda
Frank Delgado
llevando sólo piel por pertenencia.
No soportó la ropa y la mordaza
y se lanzó consigo y su conciencia.
Se fue por el camino del origen,
donde se enamoraba a cada instante.
Fue repartiendo su justicia virgen
y transformando enanos en gigantes.
Sobre su cabeza silbaban
las palabras del viejo,
la maldición:
«Pronto tu pasión será nada,
porque por lo que tengas
tendrás valor.
Te cerraré el paso a mi bolsillo,
los mercaderes, las caravanas.
Pronto tus ojos no tendrán brillo
y te dirán la plaza sitiada.»
Pero bajó desnuda a los abismos,
tan hondo como nunca se había estado,
a donde el hambre pudre con cinismo,
donde el sol era un sueño imaginado.
Y despertó países, continentes,
porque era así y no se avergonzaba.
Curaba enfermos de paciencia y muerte
con su poción de extracto de granadas.
Qué bella es, qué bella caminando,
pero qué bella esa mujer desnuda.
Qué tonto es el que no está mirando
que esa bella mujer se llama Cuba.