Tú eres como el agua que bebí de la montaña
 
 Tú eres esa lluvia con la que se baña el alma
 
  
  Eres una estrella por la madrugada
 
 Eres luz que llena todas mis mañanas
 
 Tú tienes en los ojos un lenguaje sin palabras
 
 Tu llevas en los labios agua dulce azucarada
  
 
 Tienes la belleza que jamás mirara
 
 Eres una reina eres una dama
 
 Tienes en los brazos el calor que yo buscaba
 
 Sabes comprenderme como yo necesitaba
  
 
 Tienes la ternura que yo no encontraba
 
 Eres simplemente la mitad que me faltaba
  
 
 Tú dejas a tu paso la mejor de las fragancias
 
 Tú entras en mis sueños cuando se te da la gana
  
 
 Me gusta tu cuerpo me gusta tu cara
 
 Y me gusta el ritmo que lleva tu falda
  
 
 Tienes en los brazos el calor que yo buscaba
 
 Sabes comprenderme como yo necesitaba
  
 
 Tienes la ternura que yo no encontraba
 
 Eres simplemente la mitad que me faltaba