Yo te llevo siempre en mi cabeza bien amada desde siempre, Y en la muchedumbre de miradas si me pierdo es para verte, Preso del encanto en el que muero cuando nazco de tu vientre, doy mi cuerpo entero a la pelea, loco, torturado y sonriente... siempre siempre
La canción de los dos se me abalanza en las calles la luz o el arroz, es mi fe y mi café mi voluntad contra dios todo el calor de la sangre por algo mejor
como un pajarito pregonando de pobrezas y de gentes seco del espíritu preciso, dulces aguas de tu fuente satisfecho el sol interno para dar colores a la muerte vuelvo de tu piel a la pelea loco, desafiante y mas valiente siempre siempre
La canción de los dos se me abalanza en la calle la luz o el arroz es mi fe y mi café mi voluntad contra dios con alas en cada pie, mundos gritando en mi voz vida, como deseo volver