Para enumerar tantas emociones sentidas No alcanzan estrellas ni vidas. Es nuestra memoria la gran alcancia del tiempo, Y son las pupilas los lapices que pintaran en la mente Nuestra razon. Hay tanto que ver, desde microvidas a huesos De dinosaurios gigantescos, Y dioses que son objetivo de la fe humana, Asi como diablos de cola puntuda y tridentes con los Que nos tientan. Hay tanta cosa en el planeta Y aun mas en el universo. Tanto que creer, tanto que decir, Cosas por vencer y otras de que huir. Hay sentimientos que repletan, Nos hacen mostrar el reverso. Alguna mujer, podernos reir, Saber que crecer no implica subir Mas alto. Para continuar en la dimension que contemplo Y los sueños en que sustento Mi paso en la vida, tan vano como decisivo, Requiero tanto de la luna y el sol, como del rencor y El amor. Y de la mujer que tiernamente cria flores Para colorear sus dolores, Y entrega gustosa los ojos a la luna llena, Y pide un deseo poniendo su piel, su esperanza en la Estrella fugaz. Hay tantas cosas en el mundo, Que nos ilusionan el alma: Un hijo o dos, un sistema mejor, A unos dinero, a otros amor. Hay tantos enigmas profundos Que nos apasionan y encantan; Un arcoiris, un disco volador, Un duende, un dragon, la imagen de dios... La revolucion. Hay tantas cosas escritas Que se nos vuelven ideales: La dicotomia del bien y del mal, El infierno y la salvacion final. Hay cosas que no se marchitan, Y aunque distintas son iguales. Valor y honradez, Nacimento y vejez. La vida en su esencia solo es lo que es... Humanidad.